En pleno mes de junio, en muchas casas se empieza ya a hablar del verano. Los niños afrontan sus últimas clases del curso y el tema estrella son las vacaciones. Buscar ese lugar ideal para hacer una pequeña escapadita donde huir del calor.
O incluso, empezar a pensar ya en esa playa que nos acogerá para luchar por unos días contra las altas temperaturas. Sin embargo, no hay que olvidar que la vida es cíclica y que aunque ahora solo pensemos en el verano, en septiembre todo vuelve a empezar.
Es lo que tradicionalmente se conoce como la 'vuelta al cole'. Todo un momento clave para muchas familias, ya que los padres tienen que volver a organizar la casa al completo y llegan esas lágrimas de los niños que no quieren regresar a las aulas.
Un retorno que se va a producir con novedades importantes y es que la Comunidad de Madrid ha aprobado una novedad que va a cambiar el funcionamiento de los colegios. Una cuestión que será celebrada por muchos padres, pero seguramente también por muchos niños.
Y es que los centros educativos de titularidad pública de la Comunidad de Madrid van a cambiar sus horarios. O más concretamente, los van a ampliar. No aumenta el horario lectivo, pero sí el tiempo que estos edificios permanecerán abiertos para su uso.
¿En qué consiste el cambio de los colegios de Madrid? 586q4e
Llega este mes de septiembre, con el inicio del nuevo curso, un cambio importante para los colegios de Madrid. Un giro de 180 grados confirmado por la Comunidad y que sin duda puede marcar un antes y un después para aquellas familias y padres sin tiempo.
A partir del mes de septiembre, los colegios públicos de la región permanecerán abiertos más allá del horario lectivo por las tardes. Así, los padres podrán dejar durante más tiempo a sus hijos en el centro sin necesidad de tener que buscar actividades extraescolares o cuidadores.
Una medida que intentará mejorar la conciliación familiar, ya que muchos padres se encontraban sin salida sobre qué hacer con sus hijos durante esas horas. Además, no todos disponen de abuelos que solventen la papeleta.
Para cambiar esta situación se espera que llegue Patios abiertos, una iniciativa que busca hacer precisamente de los colegios espacios con mayor vida y de mayor utilidad para los niños de cada barrio y de cada distrito.
Algo así como hacer del aula y de las instalaciones un centro de vida comunitaria donde compartir algo más que conocimientos y aprendizajes. Un lugar en el que socializar, pero también seguir formándose con actividades como la lectura o prácticas deportivas.
Esta medida comenzará con el curso 2025/2026 y permitirá a los alumnos y a otros niños de ese barrio que no estén matriculados en el centro acceder a los patios, pistas deportivas y bibliotecas escolares para disfrutar de su tiempo libre.
Así, los padres reducirán sus obligaciones a la par que sus hijos crecen en entornos seguros y protegidos. Esta iniciativa nace de un acuerdo entre la Comunidad de Madrid y los ayuntamientos, que serán los encargados de gestionar qué espacios se abren.
Está previsto que las pistas deportivas y bibliotecas sean las zonas más utilizadas, aunque cada consistorio podrá adaptar dicho proyecto a su situación. Una medida que ha sido confirmada por Isabel Díaz Ayuso con el fin de prolongar estos entornos al espacio urbano.
Durante esas horas extra, monitores contratados por el Ayuntamiento con partidas públicas serán quienes cuiden de los pequeños. También se encargarán de que estos niños respeten y usen adecuadamente las instalaciones.
Además, el plan Patios abiertos contempla que algunos centros puedan ser utilizados también en días no lectivos como antes del inicio del curso, vacaciones de Navidad o Semana Santa. Días en los que no suele haber clase, pero sí obligaciones laborales para los progenitores. Y permitirá a los ayuntamientos diseñar programas específicos para esos días.