Fotograma de la película 'Todo saldrá bien'

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Cine

'Todo saldrá bien': un retrato demoledor sobre la vejez y lo 'queer' 596k1s

La ganadora del premio del público de la sección Panorama en la penúltima edición del Festival de Berlín propone un drama con un repentino adiós. 40645w

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En Suk Suk (2019), el cineasta hongkonés Ray Yeung exploraba los distintos grados de discriminación que experimentaban dos hombres en el umbral de la tercera edad que iniciaban una relación sentimental a espaldas de sus respectivas familias.

Yeung, cuyos dos largometrajes anteriores abordaban frontalmente temáticas queer, encontraba en su tercer trabajo un hilván entre vejez y homosexualidad, sin duda el binomio sobre el que se levanta la sutil y demoledora Todo saldrá bien (2024), ganadora del premio del público de la sección Panorama en la penúltima edición del Festival de Berlín.

En los primeros compases, que reflejan la cotidianidad tranquila de Pat (Maggie Li Lin-lin) y Angie (Patra Au Ga-man), dos mujeres que llevan cuarenta años viviendo juntas, Yeung introduce un elemento que distorsiona la aparente placidez que las rodea.

La fina celosía que separa la cocina del comedor de la casa que comparten delinea un perfil carcelario que enturbia el ambiente. Esa nota discordante terminará imponiéndose como figura retórica predominante —una especie de anáfora visual— toda vez que, en el cierre del primer acto, Pat fallezca inesperadamente.

Es esa otra secuencia fundamental, primero por la sobriedad con la que Yeung filma tan repentino adiós —una pregunta, un travelling de retroceso hacia la oscuridad, una respuesta que no llega, una elipsis sobrecogedora—, después porque la celosía reaparece como marca liminar que anticipa una quiebra definitiva.

A partir de ahí, Angie deberá enfrentarse a una familia política, compuesta por sus cuñados y sus respectivos hijos, con los que mantenía una relación de extrema cordialidad que, rápidamente, vira hacia la desafección, toda vez que Pat no dejó testamento y la ley hongkonesa no ite los matrimonios homosexuales.

Ray Yeung no se limita a centrarse en el punto de vista de Angie, sino que amplía la focalización al resto de implicados, por lo demás acuciados por las necesidades. De hecho, esa pareja de mujeres hecha a sí misma —pasaron de trabajar en una fábrica a dirigir— era el sostén de la familia y la única relación estable dentro del núcleo.

La vejez y la homosexualidad forman el binomio sobre el que se levanta sutil
y demoledora la película del cineasta hongkonés Ray Yeung

Así, el hermano de Pat y su mujer apenas se mantienen con sendos trabajos frágiles, y sus dos hijos se mueven entre matrimonios mal avenidos y romances de dudoso futuro.

En Todo saldrá bien los derechos que otorga la consanguinidad se imponen a las voluntades afectivas y en los sucesivos encuentros que Angie mantendrá tanto con sus parientes indirectos como con sus padres, la planificación la desplazará del centro del plano —verbigracia esos paseos en los que parece que la cámara la arrastra, que vaya a remolque de cuanto le acontece— y solo hallará cierta estabilidad en su casa o con su grupo de amigas.

Sin alzar la voz ni emitir juicios a propósito de sus personajes, Yeung reflexiona sobre el desamparo derivado de una orientación sexual sin dejar de señalar que detrás de cada pequeña crueldad se encuentran la depredación económica y la precariedad.

Todo saldrá bien 4u2f6g

Dirección y guion: Ray Yeung.

Intérpretes: Patra Au, Maggie Li, Tai Bo, So-ying Hui, Chung-Hang Leung, Fish Liew, Rachel Leung.

Año: 2024.

Estreno: 12 de junio