Jesús Vázquez, nutricionista.

Jesús Vázquez, nutricionista. Nutrivázquez

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Jesús Vázquez, nutricionista, rotundo sobre las dietas: "El esfuerzo debe ser mental, no un castigo físico”

El nutricionista advierte sobre los peligros de las dietas milagro y recuerda que el verdadero cambio empieza por entender cómo funciona nuestro cuerpo.

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Zaragoza
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Llega el verano y con él, el habitual bombardeo de mensajes sobre la llamada “operación bikini”. Redes sociales, anuncios y hasta conversaciones cotidianas nos empujan a pensar que el cuerpo ideal para el verano es, ante todo, un cuerpo delgado.

Es importante recordar que para llevar un bikini, lo único que se necesita es un cuerpo. No hay que darle vueltas al asunto. Además, muchas voces autorizadas, como la del comunicador y coach nutricional Jesús Vázquez, nos invitan a replantear esta narrativa de cuerpos "perfectos" a cualquier precio. 

En esta época del año proliferan dietas milagro, pastillas quemagrasas y planes exprés que prometen resultados rápidos y casi mágicos. Pero la realidad es que la pérdida de peso saludable no debería tener fecha de caducidad, ni mucho menos estar dictada por la estética.

Jesús Vázquez lo resume con claridad: "No busquéis dietas o productos que os eviten el esfuerzo y la recompensa. Si no hay una patología o una genética que te lo impida, bajar de volumen tiene que ser un objetivo que se pueda conseguir".

Bajar de peso no es un pecado. Pero hacerlo sin supervisión, motivado por presiones sociales y sin entender lo que el cuerpo necesita, sí puede ser perjudicial. Por eso, contar con el apoyo de profesionales en nutrición y salud se vuelve imprescindible.

“La recompensa es salud física y mental, y el esfuerzo solo tiene que ser mental”, explica Vázquez. Es decir, no se trata de sufrir, de pasar hambre ni de renunciar al placer de comer bien, sino de cambiar hábitos con conciencia, de aprender cómo funciona nuestro cuerpo y actuar en consecuencia.

La prisa por “estar bien para el verano” es un reflejo de nuestra cultura de la inmediatez. Pero los cuerpos no se transforman de forma sana en dos semanas, ni en un mes. Y sobre todo, no hay un único tipo de cuerpo válido para disfrutar del verano, la playa o un bañador.

Lo que necesitamos es una transformación en el discurso social: que el bienestar se convierta en el objetivo y no el “bikini ready” estandarizado.

Si estás pensando en mejorar tu salud, bajar grasa o simplemente sentirte mejor contigo mismo, hazlo con responsabilidad. Consulta con profesionales formados, como los que forman parte de proyectos como NutriVázquez, donde el enfoque no es el castigo ni la culpa, sino el entendimiento y el cambio real.